Eclipse de Sol en Leo: El tiempo ha llegado

El sábado 11 de agosto, tendremos un eclipse de Sol de gran importancia para la humanidad, que sacudirá centros de poder que pueden transformarse o desmoronarse. En Venezuela no lo veremos (se verá en Rusia), pero  sí sentiremos su impacto con gran fuerza, porque a Rusia le moverá su sector de aliados  y socios, y el gobierno venezolano ha sido en los últimos tiempos, un aliado del gobierno ruso, así que la geopolítica vivirá importantes procesos de reacomodo.

El eclipse de Sol en un signo como Leo indica transformaciones profundas en los ámbitos de poder, y manifiesta además que se pondrá a prueba el poder creativo de la humanidad, tanto en lo individual como en lo colectivo y traerá consigo la llegada de nuevos liderazgos.

El efecto de un eclipse solar en Leo es muy poderoso, pues en este signo, el Sol está en su propia casa, es decir, su energía está fuerte, desbordante, de manera que un “apagón” solar tiene un efecto abrupto y contrastante, y cuando el astro rey recupera su luz, se produce un “corrientazo”, un “empujón energético” que sacude el ambiente y propicia cambios de forma más contundente y frontal.

Aunque el eclipse es parcial y no total, quedará tapado un 70% del disco solar, por tanto la energía transformadora será muy poderosa.

Como dijimos, esta es una “transmisión conjunta" de nuestra sección en Facebook “Astrología en vivo”, y de nuestro blog “El Termómetro Zodiacal”.

En “Astrología en vivo” hicimos una serie de pronósticos (ver mi página de Facebook del 23-07-.2018), y entre otras cosas hablamos de que en Venezuela un cambio estaba cerca, y dijimos que el inicio de este cambio vendría con el eclipse solar del 11 de agosto.

También dijimos que la gran mayoría de pronósticos contenidos en mi libro “Karma Cáncer, Misión Capricornio: Una visión astrológica de Venezuela” se estaban manifestando, y que justo ahora es que empieza a cumplirse la predicción central del libro (escrito en 2014) ya que desde siempre mantuve que el ciclo político actual concluiría entre 2018 y 2019; por eso el libro ahora adquiere plena vigencia. No circula en Venezuela, sino en librerías virtuales y se puede adquirir ya sea en digital o impreso, pero desde el extranjero, es publicado por la editorial The Little French.

Pues bien, volviendo al eclipse y a lo que dije en “Astrología en vivo”, el eclipse del 11 de agosto marcará una serie de sucesos de impacto, que en el caso venezolano, indica el “principio del fin” del actual sistema de gobierno. El tiempo ha llegado.

Y la influencia del eclipse empieza a notarse poco antes de que se produzca, tal como pudimos observar este sábado 4 de agosto, con el atentado a través de un dron con explosivos, contra Nicolás Maduro, quien ejerce el poder en Venezuela. Ese día estaba el cuarto menguante de la Luna, que como he señalado aquí mismo, es “la Luna de la despedida”, del cierre de ciclo. Además estaba en Tauro, “casualmente”, el ascendente del mandatario.

Pero poco antes, ya había ocurrido un hecho impactante: el juicio público contra Maduro, llevado por el Tribunal Supremo de Justicia en el exilio desde Colombia, con la intervención de la Fiscal General en el exilio, Luisa Ortega Díaz, quien hizo una serie de denuncias muy graves, no solo contra Maduro, sino con varios de sus colaboradores, a quienes señaló con nombre y apellido.

Fue significativo que se escogiera Colombia como sede de este juicio, porque la presencia de venezolanos en un recinto de Poder en el país hermano, nos hizo remontarnos a los tiempos de la Gran Colombia, cuando nuestro libertador Simón Bolívar (que por cierto era Leo) era el Presidente de la naciente gran nación latinoamericana, sueño posteriormente frustrado. Es como si de pronto, ese volver al pasado pudiera significar una reivindicación a su memoria.

Pero este eclipse solar que viene el 11 de agosto influye no sólo en Venezuela, marcará sucesos internacionales a gran escala; además, este eclipse se enlaza con otros que ocurrieron en el pasado, para dar continuidad a eventos mundiales que están en pleno desarrollo.

Es así como este eclipse guarda relación con una que hubo el 21 de agosto del año pasado, también en Leo, y que en aquel entonces tocó de manera exacta el ascendente del presidente de EEUU, Donald Trump, y por ende marcó influencia en Estados Unidos. Curiosamente aquel eclipse también toco la carta astral de Corea del Norte, y en el transcurso de este año hemos visto los “tira” y “encoge” entre el presidente de EEUU y el de Corea del Norte, pero lo más impactante fue el encuentro entre ambos mandatarios.

Ahora, este eclipse le toca a Rusia, la otra potencia mundial, cuyo presidente Vladimir Putin, también ha mantenido un “tira” y “encoge” con Trump, en donde, según los que denuncian, a veces aparecen pactos secretos entre ambos, y en otras, grandes desacuerdos y tensiones.

El ascendente de la carta astral rusa es Acuario, y el eclipse en Leo lo toca muy cerca en oposición, es decir, que Leo es el signo opuesto de Acuario, y indica que Leo es para Rusia el sector de los aliados o socios, y también de las relaciones bilaterales entre países, por tanto esta vez Rusia vivirá grandes cambios, ya sea con aliados o con países con los que mantiene relaciones.

Pero aún más allá, este eclipse del 11 de agosto guarda asombrosa relación con otro ocurrido en la misma fecha, y casi en la hora: con el eclipse en Leo del 11 de agosto de 1999. Este eclipse ocurrirá a las 5:59 de la mañana (hora venezolana) y el de 1999 ocurrió a las 7:10 de la mañana, hora venezolana, y ambos en el mismo sitio: a 18 grados de Leo.

El de 1999 nos trajo a los venezolanos grandes transformaciones: una Constituyente, una nueva Constitución, y la vaguada en el estado Vargas y fuertes inundaciones en Caracas.

Esperemos que este eclipse no traiga fenómenos de la naturaleza, pero en lo político ya parece avizorarse el cambio. En el eclipse de 1999 se derrumbaba el modelo democrático que luego llamaron “cuarta república”, y de manera progresiva se fue instalando uno nuevo que derivó hacia el totalitarismo comunista en su última fase. Ahora, este eclipse, representa la conclusión y derrumbe de este modelo, y el nacimiento de uno nuevo, el cual todavía no tenemos claro.

El  eclipse del 11 de agosto de 2018, es decir, este que tendremos en pocos días, como mencioné, está en el grado 18 de Leo, al igual que el de 1999. La carta astral de Venezuela tiene a Plutón en el grado 18 de Piscis, y por tanto el eclipse, tanto de aquel entonces como ahora, mueve su área de transformaciones, donde se derrumba lo viejo para dar paso a lo nuevo.

Pero además, en esta ocasión, el eclipse de Sol de este año toca directamente a Nicolás Maduro, quien tiene a Marte a 18 grados de Leo, por tanto el eclipse le toca muy fuertemente, en conjunción, al planeta Marte, el astro de la guerra, de la violencia, de la acción. Bueno, ya tuvo un abreboca, y por lo que pudimos ver, con reacciones tales como  “huyamos por la derecha” y con esa gran cantidad de tropa corriendo asustada, es más probable que ocurran acciones contra él, a que sea él quien lance una ofensiva, pero en todo caso, estaremos atentos, porque según lo que parecen indicar los astros está cercana su salida forzosa del poder, y la llegada de un tiempo de transición para concluir las energías de esta etapa venezolana, ya que el nuevo ciclo arranca (astrológicamente, y coincide con nuestras normas constitucionales) en enero de 2019.

No obstante hay que estar cuidadosos, porque las posibles acciones agresivas del mandatario pueden dirigirse a lo interno: represión a protestas, a opositores, etc.

Estaremos atentos. Esta ha sido una transmisión conjunta de “Astrología en vivo” y “El Termómetro Zodiacal”.

Ahora una “ñapa”. En agosto de 1999 yo publiqué en el extinto diario “Economía Hoy”, y en la extinta revista “Cábala”, un análisis del eclipse de Sol en Leo (que en aquella época fue total). Ese eclipse estuvo acompañado de una cruz cósmica, y causó mucho impacto en los venezolanos. El mismo día del eclipse fuimos invitados al programa matutino de Televen que conduce el estimado periodista Carlos Fernandes, los astrólogos Albanela Ravelo, Néstor Sánchez Quintero y este servidor. Fue en vivo en pleno eclipse. Y pocos días antes, hicimos Albanela, Antonio Polito, Gillian Day, y este servidor (astrólogos) y el músico Mario Bressanutti, un evento en el Ateneo de Caracas, para hablar de este eclipse, y era tal la expectativa del público, que se formaron grandes colas para asistir a nuestro evento, lo que nos obligó a hacer dos funciones más hasta la noche

A raíz de ese evento, quienes allí participamos formamos el grupo “La Cruzada Cósmica”, que durante un tiempo realizó eventos en Caracas, y publicó tres números de una revista astrológica llamada como el grupo: “La Cruzada Cósmica”.

Volviendo al tema, les transcribo este artículo que escribí en 1999, y que por cierto, también publiqué en el primer número de la “Cruzada Cósmica”. Aquí va…

LA GRAN CRUZ COSMICA PARIRÁ UN NUEVO ORDEN MUNDIAL

En estos instantes el cielo está enviando señales claras para quienes hemos estudiado el simbolismo cósmico, estamos en un momento crucial y decisivo para la humanidad; en estos próximos seis meses serán muchas la cosas que ocurran, y será un momento estelar para que el mundo escoja su rumbo: o evoluciona, cambia su vibración mental y se conecta con los nuevos tiempos que se avecinan, o será el cielo con su fuerza transformadora que en estos momentos se quiere manifestar, el que empujará a la humanidad a un nuevo destino.

Este 11 de agosto se produce en el cielo una configuración astrológica de alta significación: una "cruz cósmica" en la que varios astros se interconectan mediante oposiciones y cuadraturas, aspectos de mucha tensión que indudablemente pueden provocar enfrentamientos, situaciones de ruptura, cambios logrados a través de mucho esfuerzo y no sin bastante resistencia de por medio.

Y esta no es una configuración efímera, ya que está conformada por planetas lentos, cuyos efectos son profundos, y que además tienen como eje central un eclipse de Sol, evento astrológico que ya de por sí sólo, representa situaciones de cambio, muerte de viejas situaciones y un renacer a nuevas etapas.

Muchas voces agoreras han querido situar esta fecha del 11 de agosto como la del fin del mundo, la de la catástrofe final; si bien los aspectos de tensión indican también posibilidad de ciertos fenómenos geológicos y climatológicos, no quiere esto decir que está predestinado un final catastrófico. Recordemos muchas fallidas predicciones que anunciaban "fines de mundo" que nunca se produjeron.

La configuración astrológica que estará presente el 11 de agosto de este año, es decir, dentro de muy pocos días, nos trae un enlace entre el eclipse de Sol que se producirá ese día (la Luna y el Sol en conjunción en Leo, momento de Luna Nueva, propiciadora de inicios, de comenzar nuevos ciclos) haciendo oposición con Urano, el astro de los cambios radicales y abruptos, en Acuario, su morada (también el Sol estará en su domicilio, Leo, de tal forma que hay mucha energía en el ambiente).

Por otra parte, Saturno, el implacable maestro que nos obliga a cumplir la ley, ubicado muy cómodo en Tauro, se opone a Marte, el guerrero, quien se encuentra muy fuerte en Escorpio. Estos dos planetas hacen contacto con Urano y el eclipsado Sol con ángulos de 90 grados (cuadraturas) dibujando una gran cruz en el cielo.

Poco a poco nos acercamos al tiempo en que esa gran cruz cósmica se dibujará en el cielo, anunciando tiempos de cambio, momentos de tensión, de eventos sorpresivos, de situaciones que la humanidad tendrá que enfrentar. Los astros mencionados se encuentran en los cuatro signos fijos del zodíaco, representando un inigualable simbolismo esotérico para la humanidad.

Los signos antes mencionados, los fijos del zodíaco, son asociados por la Biblia con los cuatro evangelistas que escribieron el Nuevo Testamento: Marcos es Leo; Juan, Escorpio; Mateo, Acuario; y Lucas Tauro, y juntos simbolizan la gloria de Dios, visualizada por el profeta Ezequiel como una gran nube con cuatro cabezas, una de Toro (Tauro), otra de León (Leo), otra de águila (Escorpio) y otra de hombre (Acuario).

Estos meses que están por venir, y cuyo epicentro es el 11 de agosto, será una oportunidad para que la humanidad evolucione, o para que se termine de sumergir en la violencia. El eclipse de Sol que ocurrirá en agosto le da un gran protagonismo a los líderes de Leo, signo por el que además está pasando el Nodo Lunar, anunciando a los de este signo un encuentro con su destino en la vida.

Bill Clinton, presidente de EEUU, es Leo; nuestro mandatario Hugo Chávez, también. El presidente de Colombia, Andrés Pastrana, el de Perú, Alberto Fujimori, y el de Cuba, Fidel Castro, también son de Leo. Cada uno de ellos ha estado viviendo momentos cruciales en su vida y su carrera pública: Clinton enfrentó el caso Lewinsky; Pastrana vivió momentos muy difíciles en el plano militar; Fujimori se debate entre la reelección o el retiro, y Chávez, bien sabemos lo que está viviendo y junto a él, nosotros, quienes además tenemos un país con fuerte influencia escorpiana, otro de los signos fijos.

Un país como Inglaterra, con mucha influencia leonina y además, con una monarquía muy tradicional, podría sentir los influjos a través de cambios en la realeza.

Asimismo los signos de Tauro, Acuario y Escorpio estarán en el tapete: por ejemplo, el presidente de Rusia, Boris Yeltsin, es Acuario (signo opuesto a Leo) y hemos visto sus últimas vicisitudes; el papa Juan Pablo II, no muy bien de salud, es Tauro. Los países petroleros, por su parte, tienen mucha influencia de Escorpio.

El panorama mundial luce ciertamente bastante tenso. El problema de Yugoslavia no está totalmente resuelto, todavía está Milosevic al frente del país. La guerra de EEUU contra Irak está latente todavía. Pronto, Palestina se declarará como Estado soberano y hay que esperar la reacción de Israel. India y Paquistán están en tensión y muestran su arsenal nuclear. Ya la OTAN dio su primera demostración bélica, los kurdos están enardecidos por la condena a su líder Abdulá Ocalán, Colombia está sumergida en la violencia guerrillera y Venezuela se encuentra en un momento crucial donde el nuevo gobierno quiere derrumbar todo lo establecido.

El eclipse de Sol en un signo como Leo indica transformaciones profundas en los ámbitos de poder, y manifiesta además que se pondrá a prueba el poder creativo de la humanidad para "parir" un nuevo orden mundial, con la presencia de nuevos líderes. Urano nos anuncia cambios radicales, renovación total, aunque con la presencia de Marte nos alerta en torno a que estos cambios no estarán exentos de violencia, y Saturno señala ciertas resistencias de las viejas estructuras, pero también la posibilidad de construir una nueva sociedad, de estructurarla y canalizarla, y tal vez, ya en el 2000, bajo una conjunción Júpiter‑Saturno, muchas naciones estarán refundándose.

Por cierto, y esto lo acoto fuera de aquel artículo de 1999, aquella cruz cósmica coincidió con 4 presidentes venezolanos que marcaron cambios importantes en Venezuela, en los últimos años, y que pertenecen a estos 4 signos fijos del zodíaco: Tauro, Leo, Escorpio y Acuario.

Estos 4 presidentes son: Luis Herrera Campíns (Tauro) en su gobierno vino la primera devaluación del dólar, y nuestro país comenzó a cambiar; Carlos Andrés Pérez (Escorpio) en su segundo mandato hubo un cambio a fondo del modelo económico, y surgió la intentona golpista del 4 de febrero; Rafael Caldera (Acuario) en su segundo mandato rompió el modelo bipartidista que dio al traste con nuestro sistema político; Hugo Chávez (Leo); terminó de derrumbar nuestro viejo sistema político para construir uno nuevo.

PGS

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SIGNO POR SIGNO

Veamos qué áreas de nuestra vida activará el Eclipse Solar para cada uno de los signos del zodíaco.

ARIES: Se activa tu área del amor y creatividad.

TAURO: Se activa tu área de vivienda y familia.

GÈMINIS: Se activa tu área de relaciones públicas y mudanzas.

CÁNCER: Se activa tu área de producción económica.

LEO: Se activa tu área de crecimiento personal.

VIRGO: Se activa tu área del karma y subconsciente.

LIBRA: Se activa tu área de amistades y vida social.

ESCORPIO: Se activa tu área de proyección profesional.

SAGITARIO: Se activa tu área de proyectos y viajes.

CAPRICORNIO: Se activa tu área de inversiones y cambios.

ACUARIO: Se activa tu área de matrimonio y asociaciones.

PISCIS: Se activa tu área laboral, y cuidado de la salud.