martes, 24 de febrero de 2009

Un destino que no se ha cumplido...


Pedro González Silva

Hemos dicho en otras oportunidades que en 2010 se cierra un ciclo del destino del presidente Hugo Chávez, y también que ese ciclo guarda similitudes con el que vivió el ex presidente Rómulo Betancourt.

Ambos tienen sus puntos del karma en Cáncer y Capricornio, donde la carta astral de Venezuela tiene los astros más importantes: el Sol y la Luna. Por eso ambos representan hitos históricos en nuestro país.

No obstante, ambos tienen sus puntos del karma en sentidos opuestos: donde Chávez tiene su misión (Capricornio) es donde Betancourt tenía sus vidas pasadas; y donde Betancourt tenía su misión (Cáncer), es donde Chávez tiene sus vidas pasadas.

La misión en Cáncer de Betancourt, y sus vidas pasadas en Capricornio, indicaban que él era un gran organizador y le sería fácil crear instituciones que trascendieran su liderazgo personal, como de hecho ocurrió con Acción Democrática, que para mantenerse en el poder no tuvo que depender exclusivamente de su líder.

La misión de Betancourt era la conexión con el pueblo, llegar al alma de su pueblo; él logró cumplir esa misión y por eso logró el favor de las masas populares. Posteriormente su partido se desvió de esa misión y perdió gran parte de esa conexión popular.

Pero ahora veamos el caso de Chávez: él trae de vidas pasadas la conexión con el pueblo, le es fácil despertar devoción, pero su misión es crear instituciones que trasciendan su liderazgo.

Podemos afirmar que hasta ahora Chávez no ha cumplido su misión: creó el PSUV, pero este partido depende del liderazgo del presidente para subsistir. Esta realidad la reconocen todos los que conforman el PSUV y el mismo Chávez, cuando necesitan una enmienda para permitir que él siga siendo candidato, es decir, reconocen que sin Chávez, el PSUV se viene abajo, de manera que hasta ahora, no es una institución que trasciende o tiene vida propia.

En octubre del 45, cuando Betancourt participó en el golpe contra Medina, los puntos del karma estaban en Cáncer y Capricornio, y cuando entregó en el 64 la presidencia para no volver a ejercerla más, también estaban en esos dos signos.

Cuando Chávez realizó el intento de golpe en el 92, los puntos del destino también estaban en Cáncer y Capricornio, y volverán a estarlo en el 2010, cumpliéndose, como en el caso de Betancourt, un ciclo de 18 años. Veremos cómo se comporta el destino en esta ocasión.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Para Chavez, aparentemente su misión de vida y su karma se estan cumpliendo, pero cual es la misión de vida y el karma del país?

Pedro González Silva dijo...

Lo hemos dicho varias veces: Venezuela debe aprender a tomar decisiones racionales, y no emotivas... esa es su misión, parece poco, pero es bastante, tomando en cuenta que gracias a las decisiones hormonales, a actuar sin pensar, es que nos suceden tantas cosas...