Piscis es el último signo de la rueda zodiacal, y cuando se activa su ciclo, el tiempo es propicio para las transiciones, para cerrar definitivamente una etapa y prepararse para un renacer.
El Sol, transitando en estos momentos por la franja zodiacal de los peces hasta el 20 de marzo, activa junto a otros astros, un período donde debemos entregarnos al destino, no perder el foco de atención, mantener una actitud positiva y dejar que aflore nuestra sensibilidad para entendernos unos a otros.
En este tiempo de transición, hay que culminar todo aquello que tenemos pendiente, para luego ocuparnos de lo nuevo que vendrá. Si no lo hacemos, y dejamos que se acumulen cosas pendientes, estaremos generando “karma”. Es hora de limpiar el “karma”, y es importante no dejar que se siga acumulando; el ciclo de transición es para eso, para resolver lo pendiente y prepararnos a recibir el nuevo ciclo, ligeros de cargas.
Si nos adentramos en lo nuevo sin resolver lo pendiente, ese “karma” volverá a nosotros en cualquier momento; es como una materia pendiente.
Muchos planetas activan a Piscis: su regente Neptuno, que irradia las características de este signo de una forma muy potente y a la vez imperceptible; Mercurio, Quirón, y el Sol. Además; queda latente el influjo de la pasada Luna Nueva en Piscis, ocurrida el pasado 21 de febrero.
Todos esos astros activan el “karma” de Venezuela, que está justamente en Piscis. Mercurio trae confusión, comunicación poco clara, engañosa, manipulación, pero a la vez desarrolla la intuición con la que podemos defendernos de los engaños.
Quirón es el sanador herido; él no puede curarse a sí mismo, pero puede sanar a los demás si se lo propone, y sólo de esta manera podría lograr curarse él, o por lo menos mitigar su dolor.
El Sol activó la etérea, nebulosa e inasible esencia pisciana; una esencia ligada a la disolución del ego y conexión con el Todo universal, y al unirse el pasado 21 a la Luna, marcó un nuevo ciclo, el principio de un final.
Tantos planetas en Piscis están frente a Marte en Virgo, retrocediendo, y el mensaje que nos da es que el que confronta se queda solo, confundido, agotado; busca pleito y no encuentra respuesta, queda en la incertidumbre y con una sensación de impotencia que lo carcome; eso genera “karma” emocional que mina su organismo. Es hora de soltar, de entregarse al destino y dejar que el ciclo se cierre.
Y desde este mes de febrero y hasta el 25 de junio, Saturno, el astro de la estructura, el Dios del Tiempo, el que establece límites e incita a la perseverancia para lograr nuestros objetivos, se encuentra en su fase de retrogradación en el signo de Libra.
En este tiempo, Saturno trae un período de reestructuración, muy especialmente en materia de relaciones humanas y sociales, en el marco de las estructuras legales, y en las estrategias que cada quien pueda trazarse.
SIGNO POR SIGNO
Veamos qué influencia marcará el retroceso de Saturno, para cada uno de los signos del zodíaco.
ARIES: Se activa un proceso de reestructuración en el área del matrimonio o pareja estable, asociaciones y relaciones humanas.
TAURO: Se activa un proceso de reestructuración en el área del trabajo en equipo, aprendizaje para interactuar mejor con compañeros de labores.
GÉMINIS: Se activa un proceso de reestructuración en el área de los enamoramientos, diversiones, creatividad, relación con hijos, proyectos.
CÁNCER: Se activa un proceso de reestructuración en el área del hogar, familia, vivienda, bienes raíces en general, relaciones con el terruño.
LEO: Se activa un proceso de reestructuración en el área de relaciones públicas, comunicaciones, traslados cortos, intelectualidad, estudios.
VIRGO: Se activa un proceso de reestructuración en el área de producción económica, forma de ganarse la vida, escala de valores y prioridades.
LIBRA: Se activa un proceso de reestructuración en el área relacionada con la vitalidad, cuerpo físico, desarrollo personal y personalidad.
ESCORPIO: Se activa un proceso de reestructuración en el área del mundo subconsciente, “karma”, es decir las consecuencias de actos del pasado.
SAGITARIO: Se activa un proceso de reestructuración en el área de relaciones sociales, amistades, grupos con metas afines, asesores y guías.
CAPRICORNIO: Se activa un proceso de reestructuración en el área profesional, de proyección pública, destino, un nuevo rumbo que darle a la vida.
ACUARIO: Se activa un proceso de reestructuración en el área de metas superiores, ideales, producción de ideas, espiritualidad, viajes al exterior.
PISCIS: Se activa un proceso de reestructuración en el área de inversiones, herencias, pago de dinero pendiente, transformaciones, evolución.
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